Lo que no Mata, Fortalece

marzo 22, 2016

Brasil está bajo presión; desde escándalos de corrupción, disturbios sociales que exigen el fuero político de su presidenta y la volatilidad financiera del mercado, más adelante, hay un camino desafiante para uno de los motores económicos del mundo. Las buenas noticias son que la tendencia en ambos terrenos, el económico y el político, está cambiando a favor de dicho país y los inversionistas a nivel mundial lo están considerando.

El intento de la Presidenta Brasileña Dilma Rousseff de traer a su predecesor Luiz Ignacio Lula da Silva, a su gabinete la semana pasada mientras se enfrenta a cargos de corrupción, se ha disparado en contra del gobierno y aumentó las demandas para su juicio político. Con la economía en una recesión (crecimiento proyectado para el 2016 es de -3.5%) y mucha de la coalición implicada en un escándalo de corrupción, la presidenta se ha vuelto un símbolo de problemas en Brasil.

Es importante recordar que el reciente malestar político y económico de Brasil se debe al resultado de drásticas condiciones externas que afectan a la mayoría de las naciones en desarrollo alrededor del mundo (incluyendo a China). Ahora que estas condiciones están cambiando, con el rebote del precios del petróleo y el aumento de las reservas mundiales, las perspectivas de estas regiones netas exportadoras del mundo se incrementan rápidamente.

De acuerdo con Bloomberg, los inversionistas han agregado $2.72 mil millones la semana pasada a los activos y bonos de mercados emergentes. Esto ocurrió en un momento en que la Reserva Federal de Estados Unidos no estaba segura de su posición subiendo las tasas de interés que amenazan el dólar a corto plazo y apoyando la demanda para activos de mayor rendimiento en mercados emergentes. La renta variable india se extendió a un rally de tres semanas y los bonos ganaron por un octavo día mientras el banco central del país esta a punto de reducir los costos de endeudamiento. Las acciones brasileñas llegaron al punto más alto desde Julio del año pasado debido a los precios más altos en los commodities ayudaron a extender ganancias guiadas por prospectos del cambio de gobierno. El rublo ganó 0.8%, el crudo Brent se vendió por encima de $41USD por barril.

“Brasil tiene unos vientos que tiene que sobrepasar, y muchos factores desde la volatilidad del mercado hasta la poca habilidad del gobierno para hacer cualquier cosa han bajado las valuaciones a niveles muy atractivos.” Dicho por Brett Diment, Director de Deudas en Mercados Emergentes del Aberdeen Asset Management en Londres.

La economía de Brasil demuestra una señal de recuperación. La mejoría de la cuenta actual de Brasil, con una baja de 43% en el déficit de $58.9 mil millones en 2015 comparado al 2014 y el hecho de que la inversión directa extranjera ahora cubre 127% de ese déficit es un gran comienzo. Con la inflación pasando su clímax, el real amortizando sus niveles y el crecimiento contractándose a un paso más lento que antes. Esta perspectiva positiva fue provocada por un crecimiento de 0.4% de producción industrial en el país comparado al mismo periodo el año pasado.